Luis Ernesto Quintero Mejía, un verdadero salamineño con corazón sanfeleño, es un hombre que ama profundamente lo nuestro. Su incansable esfuerzo por mantener hermoso el parque de San Félix es simplemente admirable.

Su dedicación y compromiso no tienen igual. «Néstor», como cariñosamente le llaman las personas de su comunidad, es un individuo que merece reconocimiento por su amor y dedicación en su labor de conservar nuestros bellos paisajes, como el parque, las calles y las cañadas. Es importante destacar que este gran amante de San Félix continúa ejerciendo su trabajo, incluso en ocasiones sin un contrato oficial con el municipio. Lo hace simplemente porque no quiere interrumpir el proceso al cual ha entregado su alma, su corazón y su vida.

Además de su labor en la conservación, Luis Ernesto también es un bombero voluntario del municipio. Esto demuestra aún más su espíritu solidario y su compromiso con la seguridad y el bienestar de su comunidad.

En resumen, Luis Ernesto Quintero Mejía es un ejemplo de dedicación y amor por su tierra. Su arduo trabajo en la conservación de los escenarios naturales y su compromiso como bombero voluntario lo convierte en una persona digna de reconocimiento. Su labor y entrega son una inspiración para todos aquellos que valoran y aman su entorno; es “Gente del Bicentenario”

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