La Basílica Menor Inmaculada Concepción
La majestuosa Basílica Menor Inmaculada Concepción se erige con singular esplendor en la Plaza Principal, donde ostenta el título de ser un símbolo del Patrimonio Arquitectónico y Patrimonio Cultural de gran valor. Fue en el auspicioso día 26 de octubre de 1865 cuando dio inicio la construcción de este icónico templo, memorable jornada en que el presbítero Francisco Isaza puso la primera piedra junto a monedas, objetos religiosos y la venerada bandera nacional. Los esfuerzos para erigir este monumento perduraron hasta el 15 de febrero de 1874, fecha culminante que marcó el término de una laboriosa labor que hoy trasciende en el tiempo.
Con un diseño que remite al estilo Romano, la Basílica se destaca por sus imponentes tapiales que, conjugados con sobriedad y elegancia, confieren una magnífica presencia a su fachada construida en Calicanto. Este singular material, tramado con una mezcla de elementos naturales y sangre de bovinos – conocida como argamasa – surte un efecto de cemento que resalta la belleza y durabilidad de cada detalle de su estructura principal.
A pesar de haber experimentado tres etapas constructivas, la Basílica Menor Inmaculada Concepción guarda en sus cimientos la historia y el esfuerzo de generaciones pasadas. La primera fase, erigida en bahareque y teja allá por el año 1829 bajo la dirección del presbítero Ramón Marín, contó desde sus albores con la inquebrantable participación de los devotos habitantes del municipio. Este periodo inicial estuvo marcado por la incursión de colonos y arrieros, quienes contribuyeron a la construcción de la modesta estructura de madera y guadua que se erigió en aquel entonces.
A lo largo de los años, la Basílica ha sido testigo de la evolución de la comunidad local, convirtiéndose en un símbolo de fe y arraigo para todos aquellos que han contribuido a su desarrollo y conservación. Su presencia imponente en la Plaza Principal es un recordatorio tangible de la importancia de preservar y valorar nuestro patrimonio cultural, que perdura como un legado invaluable para las generaciones venideras. ¡Qué honor es contemplar la grandiosidad de la Basílica Menor Inmaculada Concepción, emblema vivo de nuestra historia y tradición!
La segunda la etapa consistió en el levantamiento de la estructura actual la cual se encuentra ubicada en la misma parte que la anterior, en la parte nor-occidental del municipio, tiene 40 metros de ancho por 80 metros de largo, a simple vista tiene forma de bóveda, posee 3 torres de las cuales la principal está adornada por un reloj Suizo y un bello campanario; su fachada igualmente posee tres grandes puertas talladas en madera con bellos calados elaborados por uno de los más grandes exponentes de madera en la región antioqueña, Eliseo Tangarife, acompañado de artesanos salamineños, quienes estuvieron encargados de los trabajos de madera.
El interior del templo consta de una sola nave sin columnas, ha sufrido grandes cambios debido a accidentes, simple deterioro por efectos del medio ambiente. En un principio el templo poseía columnas que luego fueron eliminadas, el techo del templo poseía bellos frescos en el cielo raso que fueron realizados en el año de 1919 por el ecuatoriano Isaías Troya; quien tuvo la obligación de crear tan bella obra para Colombia y el mundo, en su parte estructural fue el Inglés William Martin quien era ingeniero en las minas de Marmato, junto con la colaboración de muchos personajes del municipio.
El Padre José Joaquín Barco llegado de Rionegro, Antioquia, en el año de 1881 se dio a la obra de concluir el templo, siendo esta la tercera etapa de su construcción; trajo también de Rionegro al maestro y artesano de la madera, Eliseo Tangarife; entre la ornamentación hizo artesonar y pintar de colores adecuados las bóvedas del edificio, dispuso la construcción de dos altares de madera, el presbiterio, las balaustradas que separan las tres naves, el pulpito bellamente tallado, el coro, el bautisterio, todo en materiales excelentes; trajo el reloj suizo, un órgano de viento de 300 flautas de la casa francesa Merklyn, y el altar de mármol de Carrara que ocupa la parte central del presbiterio, dotó también el Templo de muchas imágenes de indiscutible mérito artístico, muchas de ellas de Barcelona, España y otras del Taller Carvajal de Envigado, Antioquia. Los vitrales son obra de la casa Velasco de Cali, ejecutados por el pintor Alberto Mazzola Portáz, barcelonés compañero de Picasso, Miró y Gaudí, interpretan pasajes alusivos al libro sagrado, fueron instalados a mediados de siglo XX.
Elementos Sagrados en el Museo Religioso de la Basílica Menor
La Basílica tiene entre sus elementos religiosos:
• Cáliz de plata con baño de oro, este tiene imágenes del rostro del Corazón de Jesús, la Virgen, Ángeles, El Espíritu Santo y otras imágenes, tiene incrustadas esmeraldas y otras piedras preciosas, actualmente se encuentra en una urna bancaria.
• Las llaves del Sagrario del Templo de la Inmaculada Concepción, son dos llaves una es una cadena de plata bañada de oro con alegorías eucarísticas, la otra es de oro, tiene el rostro del Papa Pio XII, su urna es de plata. La orona de la Virgen de la Inmaculada, es una bella variedad de flores trabajada en delicada filigrana de oro y terminada con un moño, fue elaborada en Rio Negro.
• El niño Dios traído de España en 1905 de la casa Reixache de Barcelona.
• Cuadro del Señor del Improperio, de la escuela Quiteña.
• Estatua de San José, del taller de Envigado.
• Crucifijo: Es obra antigua del siglo XIX. Arte barcelonés, de la Escuela de Alfonso Berruguete, que tuvo sus inicios en el año de 1.520.
• La cuna del Niño Dios traída de Barcelona España 1917.
• La Magdalena autor Álvaro Carvajal.
• La inmaculada Concepción Escuela Quiteña.
• Agujas estilo gótico, candelabro y atril Eliseo Tangarife.
Taller Carvajal, Álvaro Carvajal Martínez: nació en Don Matías, Antioquia en 1845, estudio pintura con los maestros Fermín Isaza Y Carlos Greiffenstein, fundo con sus hijos Constantino y Álvaro un taller en Envigado. Una de sus obras más notables es el Resucitado que pertenece a la Parroquia de Salamina.
En alguna ocasión un periodista Manizaleño afirmo que las campanas del templo de la Inmaculada concepción, de sonido vigoroso y nobilísimo habían sido fundidas en Paris (Francia). Esto no corresponde a la tradición Salamineña, ni a los datos históricos contenidos en el informe dado por el Presbítero Doctor Guillermo Duque Botero, donde inclusive, termina con toda claridad que las campanas fueron fundidas por el Señor Don Basilio Restrepo, obrero honrado y competente en. Salamina.
Señala la tradición que la actual plazoleta frente al colegio de la Presentación como sitio donde se cumplió la delicada labor de fundición, aquellas valiosísimas piezas después de que estuvieron terminadas fueron traídas en hombros hasta la actual plaza principal donde aún ni siquiera se había terminado por completo la construcción del templo. Como hecho curioso y complementario, tanto los documentos del Reverendo Presbítero Guillermo Duque Botero como la tradición afirman que cuando el metal estuvo en ebullición y listo como un líquido para ser vaciado en los moldes, muchas personas distinguidas, hombres y mujeres arrojaron al metal fundido joyas y monedas de oro, como un homenaje, circunstancia que según se afirma contribuyó de manera notable a la gran sonoridad y potencia de estas campanas ya más que centenarias.
Tomado del archivo digital de la Casa de la Cultura ·Rodrigo Jiménez Mejía”
** Calicanto: Un procedimiento de construcción a base de cal y cantos rodados por medio de argamasa**
Si se parte de la etimología de esta palabra, tenemos como lexemas de la misma a: cal que significa óxido de calcio, que es la sustancia de color blanquecido, que cuando se pone en contacto con el agua desprende calor y se hidrata. Cuando se la mezcla con arena se forma la argamasa. Y el otro componente que es canto si bien se refiere al lado o también esquina de algo, también designa a un trozo de piedra.
De este modo podemos inferir que la definición de este vocablo es: una construcción o el procedimiento por el cual se realiza una construcción con piedras que están unidas con argamasa. A esta mezcla se la suele llamar también mampostería y por tanto a su construcción, obra de mampostería.
*** Argamasa: Mezcla de diversos materiales, como cal o cemento, arena y agua, que se usa en la construcción para fijar ladrillos y cubrir paredes.