La Familia Gómez en la Administración Municipal de Salamina

La familia Gómez desempeñó un papel fundamental en la fundación y administración de Salamina, con varios de sus miembros ocupando la alcaldía entre 1832 y 1890. Su influencia dejó una huella profunda en la historia política, social y cultural del municipio.

Por Eleuterio Gómez V. Editor

Los Fundadores

La fundación de Salamina fue un evento cuidadosamente planificado y ejecutado por algunos de los miembros más ilustres de la sociedad antioqueña. Como señala Daniel Echeverri Jaramillo, “los que fundaron a Salamina no fueron arrieros paisas buscadores de fortuna, ni vagabundos analfabetos. Aquí llegó lo más selecto de la sociedad antioqueña, y las primeras familias trajeron a los obreros y artesanos que le dieron fisonomía a Salamina. Eran gentes muy cultas, ricas y de buen gusto que quisieron construir una ciudad bonita y ordenada desde el principio”.

La historia de Salamina comienza en 1827, cuando los primeros pobladores realizaron la rocería comunitaria para iniciar la urbanización del territorio. Entre los primeros nombres figuran Pablo, Fermín y Manuel López; Nicolás y Antonio Gómez Zuluaga; Francisco Velásquez; Juan José Ospina y Carlos Holguín. Según el historiador Uribe Ángel, la comisión de trazar la población recayó en Juan José Ospina, quien además se encargó de la distribución de solares entre los pobladores.

El desarrollo religioso fue clave en la consolidación del municipio. El presbítero Martín de la Cuesta, párroco de Arma, fue el encargado de oficiar la primera misa en una modesta capilla de paja construida por Fermín López, Nicolás y Antonio Gómez. Esta capilla fue el epicentro de la vida espiritual de los primeros moradores de Salamina hasta la construcción del primer templo en 1840 bajo la dirección del padre Marín, en el mismo sitio donde hoy se encuentra el actual templo.

Los hermanos Antonio y Nicolás Gómez Zuluaga provenían de una destacada familia antioqueña. Eran nietos del capitán Antonio Gómez de Castro y de doña Jerónima Jiménez Duque, una familia de gran influencia económica y cultural en la región. Antonio Gómez de Castro, nacido en Medellín en 1704, fue un jurista formado en el Colegio Real de San Bartolomé y receptor de una merced de tierras desde Marinilla hasta el Río Magdalena en 1751, fundador de Santuario en 1776. Su linaje y su visión fueron fundamentales en la construcción y organización de Salamina.

Cabe destacar que, aunque en Salamina se habla de siete troncos familiares Gómez, la investigación minuciosa ha revelado que todos los Gómez originales de Salamina pertenecen al mismo tronco de los Gómez Zuluaga. Esto se debe a que los hermanos José Nicolás y Antonio Gómez llegaron con una numerosa descendencia, estableciendo líneas familiares que, con el tiempo, se diversificaron y se consolidaron en la vida política y social del municipio.

Los Gómez en la Alcaldía de Salamina

Desde los primeros años de la historia de Salamina, los miembros de la familia Gómez han jugado un papel preponderante en la administración municipal.

El primer alcalde del municipio fue Pablo López Osorio en 1828, hijo del primer matrimonio de don Fermín López. Sin embargo, el primer alcalde perteneciente a la familia Gómez fue Januario Gómez Arbeláez, hijo de José Nicolás Gómez Zuluaga y María Josefa de la Luz Arbeláez, quien ocupó el cargo entre 1832 y 1834 junto a Fermín López.

Desde entonces, la presencia de los Gómez en la administración municipal fue una constante:

• 1837 – 1840: Vicente Gómez, hijo de Antonio Gómez Zuluaga.

• 1844 – 1845: José María Gómez, hijo de Antonio Gómez Zuluaga.

• 1848: Eleuterio Gómez Arbeláez, junto a Elías González y Joaquín Bernal.

• 1850: José Elías Gómez, hijo de Antonio Gómez, junto a Manuel Giraldo.

• 1856: Eleuterio Gómez Arbeláez, con Félix Vélez y José Domingo Gallo.

• 1861: Santiago Gómez, nieto de Antonio Gómez Zuluaga, junto a Pantaleón Escobar, Narciso Llano y otros.

• 1862: Eleuterio Gómez Arbeláez nuevamente, con Pedro M. Robledo y Manuel Marulanda.

• 1866: Santiago Gómez, con Luis Escobar y José María Duque.

• 1869: Eleuterio Gómez Arbeláez, con José María Duque A.

• 1876 – 1878: Ramón María Gómez Hoyos, hijo de Eleuterio Gómez Arbeláez, con Pedro Mejía y Baudilio Agudelo.

• 1885: Ramón María Gómez Hoyos, con Pastor Mejía y otros ciudadanos notables.

• 1887 – 1888: Ramón María Gómez Hoyos, con Ricardo Ángel J., Francisco Álzate Duque y Manuel Tiberio Duque.

• 1888 – 1890: Ramón María Gómez Hoyos, junto a su hermano Eladio Gómez.

La lista de alcaldes de la familia Gómez en Salamina refleja su inquebrantable compromiso con el desarrollo del municipio, desde sus primeros días hasta bien entrado el siglo XIX. Posteriormente, aunque no se han encontrado registros detallados, se sabe que varios descendientes de esta influyente familia han continuado ejerciendo cargos públicos y contribuyendo al progreso de Salamina.

La familia Gómez ha sido una pieza fundamental en la historia de Salamina. Desde su fundación, participó en la construcción de la identidad cultural y política del municipio. Su presencia en la administración local ha dejado una huella indeleble en el desarrollo de esta ciudad, conocida como la «Ciudad Luz» de Caldas. Con un legado que abarca más de un siglo de servicio público, la familia Gómez sigue siendo un símbolo de liderazgo y compromiso con el bienestar de Salamina y su gente.

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